La Edad de la Ira, una historia del presente

Como diría mi buen amigo Milton, los libros de historia cada día son más extraños…y, al parecer, los buenos historiadores ya no se gradúan solamente en las mejores universidades británicas.

Al premiado ensayista indio Pankaj Mishra le gusta la política y también los temas polémicos como, por ejemplo, los contrastes culturales entre nosotros, los limpios y adinerados occidentales, y ellos, alejados y confundidos orientales.

La edad de la Ira es realmente una historia de nuestra sociedad comercial del presente, universal y desigual, productiva, consumista, con un futuro cada vez más insostenible y distópico.

Hoy en el mundo consideramos a la modernización capitalista como la puerta a la felicidad o, simplemente, el camino más corto hacia la prosperidad.

Pero sociólogos, politicólogos, progresistas profesionales y, por supuesto, algunos perdedores de postín se preguntan, ¿cómo llegamos a esto?

Muy fácil: poniendo a Dios en su lugar. Porque solo de él venia la legitimidad, el orden natural eterno, las autoridades establecidas y los artículos incuestionables de la fe, todo dentro de un paquete inmutable llamado religión y bien envuelto por el papel jerárquico del cristianismo. Hasta que las ganas de hacer negocio se desbordaron y apareció la política y el laicismo. Entonces la religión empezó poco a poco a ser considerada como una actividad humana más, tanto como la filosofía o la economía.

Basta de guerras cruzadas y fanatismo religioso, ha llegado la hora del comercio y la prosperidad bajo los regímenes laicos. Las monarquías europeas se pusieron en marcha para castrar el poder de La Iglesia, sin saber que corregían un destino muy similar…

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